
Ser profesional
La felicidad es curiosa, porque es muy personal y si hablamos del nivel profesional, ya ni te cuento.
Teniendo como base mi apreciación de que todos somos diferentes, lo que voy a hacer a continuación es explicarte mis conclusiones después de un largo camino.
¿Qué conforma el bienestar profesional?
He dividido en cuatro (4) partes las bases sobre las que se asienta el bienestar profesional desde mi punto de vista y que están todas ellas íntimamente interrelacionadas.
1.- Conocimientos técnicos
Los conocimientos técnicos son aquellos que te ayudan a llegar hasta el objetivo, o profesión en la que quieres estar. Son las llamadas competencias umbral (como el requisito de la experiencia para acceder a un puesto).
Ocupan una gran parte de tus inicios en el mundo laboral y son muy necesarios para gestionar el trabajo que quieres realizar. Con conocimientos parecidos tienes muchas personas que pugnan por puestos similares al tuyo.
2.- Inteligencia emocional
La importancia de la inteligencia emocional aumenta a media que asciendes en el escalafón, siendo lo que te hace mantenerte en una determinada posición y evolucionar hasta otra superior. Va directamente ligada a cuestiones no tan medibles como los conocimientos técnicos, ya que van perdiendo importancia a medida que el trabajo a realizar es mayor.
«Las competencias emocionales más relevantes para el éxito caen dentro de los tres grandes grupos siguientes: Iniciativa, motivación de logro y adaptabilidad.
Influencia, capacidad para liderar equipos y conciencia política.
Empatía, confianza en uno mismo y capacidad de alentar al desarrollo de los demás.»
Daniel Goleman
Estoy hablando aquí de: iniciativa, empatía, conciencia de uno mismo, adaptabilidad, capacidad de persuasión, servir de catalizador de cambio, aprovechamiento de la diversidad, adaptación al cambio, optimismo, flexibilidad, autocontrol, respuestas creativas a los contratiempos, confianza, motivación, habilidad de negociación, cooperación, predisposición, liderazgo, capacidad de comunicación y habilidades interpersonales, pericia y compromiso
Todo depende de la relación que mantengamos con nosotros mismos y con los demás, de perfiles de fortalezas y debilidades únicos que van evolucionando a lo largo de los años ya que se basan en la experiencia.
3.- Propósito
El propósito es ese conjunto de habilidades innatas que unidas a tus conocimientos técnicos y a la inteligencia emocional harán que tu jornada laboral se encuentre en estado de flujo. Porque el rendimiento máximo se obtiene cuando hacemos lo que nos gusta y disfrutamos de ello.
«Ese estado de flujo aparece cuando movilizamos todas nuestras habilidades para concentramos hasta quedar suspendidos “fuera del tiempo” y llegar a perdernos en lo que estamos haciendo. En ese estado parece que hagamos las cosas sin realizar esfuerzo alguno y nos adaptemos a las exigencias siempre cambiantes de la situación. El estado de “flujo” es, en sí mismo, un placer.»
Daniel Goleman
Solo tu tienes la llave para entender y unir esas habilidades que traes de serie, eso que se te da bien, y de las que dispones para ayudarte a conseguir tu propósito. Solo tu sabrás que tu GPS está correctamente calibrado.
Ayudarte a recordarlo y dirigir correctamente tu brújula, hoy es posible mediante el Geniotipo, del que te dejo el enlace por si quieres profundizar.
4.- Vida Personal
El equilibrio en tu vida personal, lo que te alimenta tanto física como psicológicamente influirá directamente en tu rendimiento laboral.
Lo que comes, lo que consumes ya sean alimentos, información o música, lo que te cuides, el ejercicio o no que realices. Lo que descanses, lo bien que te conozcas, tus amistades, tu entorno familiar, donde vives. El orden, la limpieza, tus metas y tus creencias, incidirán directamente en esas 8h de las 24h del día que empleas en el trabajo.
Porque alguien cuyo hijo esté gravemente enfermo difícilmente podrá ser igual de productivo que cuando estaba sano.
Nadie es mejor o peor profesional por uno solo de estos puntos. Una frase que también he escuchado hace poco y que se podría añadir es
«No se puede ser buen profesional si no se es buena persona»
William Ramos
Todo influye de una forma u otra para conformar tu realidad diaria. Descuidar una de las áreas incidirá antes o después, en el resto. Enfocarte en gestionar cada una de ellas, también.
Estar en el lugar correcto, haciendo el trabajo correcto, con las personas correctas y tal y como deseas, es posible y está en manos de cada uno el lograrlo.
Unir todos estos puntos de la forma que te hacen feliz, te convierten en un profesional único, que irremediablemente destacará sobre otro, en el mismo puesto y con la misma profesión que no esté en ese punto de armonía.
El equilibrio entre lo que piensas, lo que sientes y lo que haces te llevarán directamente a un destino, tu felicidad. La tuya, la que te hace sentir un ser completo. Descifrarla y sostenerla hacia tu objetivo mayor es la mejor parte del juego de la vida, y te recuerdo, que hemos venido a jugar.
El paradigma está cambiando. Ya no somos felices solo sintiendo que una de estas áreas está bien. Lo queremos todo.
Y pregunto, ¿Por qué no? ¿Qué te falta? ¿Sientes que es posible? Yo sí.
Te leo.

